AGIAINST GENTRIFICATION
Hablar de gentrificación hace unos años parecía una excentricidad o un trabalenguas academicista. En estos momentos este termino forma parte del mainstream incluso nos atrevemos a decir que forma parte de la cultura popular. Es un termino que ya esta extendido y esta identificado en mayor o menor medida. Sin embargo, a fecha de hoy sigue sin entenderse del todo el fenómeno ya que es simplificado en muchas ocasiones por la hipsterizacion de los barrios.
Pero más allá de este tópico simplista, este fenómeno nos habla de un proceso más serio y de más calado que implicando expulsión de sus habitantes como consecuencia de un procesos puramente especulativo. Esto implica una vulneración del derecho a la ciudad ya que se imponen las reglas neoliberales en favor de los intereses de unos frente a otros por códigos puramente mercantilistas. El derecho habitar en un territorio, en la comunidad y tejido social que se ha construido durante años se rompe cuando irrumpe el mercado con sus caprichosos vaivenes. El papel de institución que debiera proteger ese derecho, sin embargo, en muchas ocasiones es todo lo contrario y es cómplice de los intereses especulativos al desproteger por su inanición y falta de políticas públicas que reviertan esta situación.
AGAINST GENTRIFICATION
Talking about gentrification a few years ago seemed like an eccentricity or an academic tongue twister. Now this term is part of the mainstream and we even dare to say that it is part of popular culture. It is a term that is already widespread and identified to a greater or lesser extent. However, to date the phenomenon is still not fully understood as it is often simplified by the hypsterization of the neighborhoods.
But beyond this simplistic topic, this phenomenon tells us about a more serious and deeper process than involving the expulsion of its inhabitants as a consequence of a purely speculative process. This implies a violation of the right to the city, since neoliberal rules are imposed in favor of the interests of some in the face of others by purely mercantilist codes. The right to live in a territory, in the community and social fabric that has been built up over the years is broken when the market bursts in with its capricious swings. The role of the institution that should protect that right, however, is often the opposite and is an accomplice of speculative interests by unprotected by their inanition and lack of public policies to reverse this situation.